La Llorona

Llorando dice que no
que no queda nada
que nada en la nada
y llorando se moja
se enoja
se pone furiosa y roja

Esperando la carroza
que roza sus rosas rosa
la pena le llora y llorando se moja

Ya no hay viajes en carroza ni rosas rojas
Llorando que no queda nada
que nada en la nada se pone furiosa
roja la sangre saliendo de ella la moja
dejando una mancha roja


Entonces ya no llora
y riendo dice que si
que lo tiene todo, incluso el tiempo.

Se le antoja decir que si riendo
Con una rosa roja en el pelo
contenta silvando y bailando se va.

Y al rato vuelve llorando.

René

Se enlistò en la fuerza aerea porque le gustaba la idea de volar, un dia sobrevolando la selva el aviòn se averiò y al grito de “Jerònimo” saltò al vacio.

La Piraña

Una piraña vegetariana mordisquea algas en el fondo del rio mientras las demàs le hincan el diente a un paracaidista que acaba de caer .

Fobia

Le tenía fobia a las monedas, si las escuchaba sonar una ola de adrenalina le subía , si veía una se aterrorizaba y la sola idea de tocar una lo paralizaba de panico .
Por eso tenía que dejar siempre el vuelto y su vida era muy cara .
Los billetes se le iban volando, su negocio eran las drogas, no podía ganar tanto trabajando de obrero.
Como tenia que aprovechar cada billete al maximo siempre invitaba o llegaba con regalos. Una colonia, una botella de vino, un leòn de peluche, una caja de bombones.
Los mendigos lo odiaban porque nunca daba limosna pero quienes lo rodeaban le tenian gran estima. Asi fue por lo menos mientras las cosas anduvieron bien .
Despuès a la càrcel nadie iba a verlo .

The Last Punkrocker

Chicos malos y sensuales escupen fuego
Sacan la lengua, muestran los dientes
lo odian todo

Hay una nueva Boy Band
Adolescentes Punk
Està ardiendo la ciudad
y entre las llamas tu cara

En el ocaso del mundo las viejas costumbres
Yo era el punk y el punk era yo
En el borde del abismo reconozco mis ojos
el punk ha muerto y he muerto yo
Desolaciòn, consolaciòn,
hundirse en el fango cerrando los ojos
Fango de tu propia tierra y lagrimas
Para crear seres de arcilla con grandes sonrisas
y vasijas donde poner las flores del camino
en el atardecer de tus ojos biònicos
sumergido en la fauna marina de tu alma entre las rocas

Tiburones hambrientos de ti y de mi
Fluctuando en camara lenta a través de las tinieblas de abril
Perdiendo cabellos, soltando pelusas, atrapados por la ley de gravedad.
la envidia tiene dientes que desgarran la carne
El joven de espititu se reconoce en la superficie del agua
(que en realidad es un charco de su propia sangre)
iluminado por la luz de la luna.
Un rebelde sin casa.